FRANCISCO, OBISPO SIERVO DE LOS SIERVOS DE DIOS, al venerable hermano Juan Antonio Menéndez Fernández, hasta hoy Obispo titular de Nasai y auxiliar de la sede metropolitana de Oviedo, y Obispo electo de Astorga, nuestro saludo y Bendición Apostólica.
Siendo necesario proveer a la Iglesia Catedral Asturicense, vacante tras la renuncia del Excelentísimo Señor Camilo Lorenzo Iglesias, Nos, que somos sucesor en el puesto del beato Pedro y desempeñamos la gravísima función de Pastor Supremo de toda la grey del Señor, a ti, venerable hermano, dotado de reconocidas cualidades y versado en temas eclesiales y en Teología y Derecho Canónico, te consideramos digno para regirla. Así pues, en virtud de Nuestra Suprema Autoridad Apostólica, desvinculado de la Sede titular de Nasai y del mencionado deber de auxiliar, te nombramos Obispo de Astorga con todos los derechos y obligaciones. Te encargamos asimismo que des a conocer estas Letras a tu clero y a tu pueblo, a los cuales exhortamos a que te acojan de buen grado y permanezcan unidos contigo.
Finalmente procura, venerable hermano, sobre todo esforzarte, sostenido por los dones del Espíritu Paráclito, en vivir como Cristo vivió y amar como Él amó. Su luz y su paz estén, por intercesión de Nuestra Señora de Fátima, siempre contigo y con esa queridísima comunidad católica en la apreciada España.
Dado en Roma, junto a San Pedro, el día dieciocho de noviembre del Año del Señor dos mil quince, tercero de Nuestro Pontificado.