Zaragoza, 26 de septiembre de 2016
Ante la información aparecida en diversos medios de comunicación sobre la detención por agentes de la Policía Nacional de una persona considerada como presunto “ciberdepredador sexual” y que trabajaba como portero en una parroquia de la ciudad de Zaragoza, este Arzobispado manifiesta:
1. Condena sin paliativos los hechos que se le imputan a dicha persona.
2. Expresa su dolor y cercanía a las víctimas y a sus familias.
3. Que la persona a la que se imputan estos delitos ha sido retirada de su puesto de trabajo.
4. Este Arzobispado colaborará en todo momento con la autoridad policial y judicial para esclarecer los hechos y circunstancias.
5. Nuestro ordenamiento jurídico garantiza la presunción de inocencia y por eso solicita que el tratamiento de toda la información sobre este caso busque siempre la verdad de los hechos y el respeto absoluto de las personas.